Transmisiones. Hoy, Russian Red.

¡Hola lector@s! Si alguien se ha pasado por aquí mientras no estaba, perdonad mi ausencia, algún que otro problema visual me ha mantenido apartado completamente de estos mundos, pero voy volviendo poco a poco. Han pasado cosas desde la última vez que escribí, desde un nuevo disco de Zahara al estreno de la segunda temporada de The Walking Dead, sin olvidarme de lo más (que a veces viene a ser lo menos) importante, unas elecciones generales sin emoción por un resultado previsto de antemano.

Pero lejos de hablar de ninguna de estas tres (si bien de lo primero ya haré un análisis), estos días me he vuelto a acordar de Lourdes Hernández, Russian Red, esa sencilla cantautora pelirroja con mágica voz. Pelirroja al menos ahora. La primera que escuché es la misma que tú, y que tú, y que tú. Cigarettes. Cómo no. A esa canción le debo dos cosas. Una, haber hecho de "Camino" una de mis películas preferidas, y además inolvidable. La otra, descubrirme el "I Love Your Glasses". Para mágico, ese disco.

Ahora hablamos de él. Pero por si fuera poco, este año Lourdes ha lanzado su segundo disco (para no mentir, Lourdes y los chicos de Belle & Sebastian a los instrumentos), titulado Fuerteventura. No, tranquil@, si no lo has escuchado, ya te adelanto que no es en español. Una canción se titula así pero la letra tiene de español lo que Yannick Noah de buena gente (ZAS, ¡al vuelo!). Volviendo al disco, bajo mi punto de vista, la señorita ha alcanzado una madurez musical comparable a muy pocas cosas. El cambio ya no solo de sonido (que hasta un sordo notaría) sino de amplitud de miras, introduciendo más instrumentos, más tipos de canciones, más variantes en su voz...más talento, si cabe. Tal es el cambio que excepto a los fans escépticos (me incluyo) que ni vemos ni queremos ver más allá, a quien le gustó I Love Your Glasses no le ha gustado Fuerteventura, y viceversa.
Por qué no decirlo, se ha perdido en parte el enfoque SÚPER indie del primer volúmen, más vacío y personal que su sucesor. Yo, hoy por hoy, todavía no se con cuál quedarme.

A lo que voy, que es ni más ni menos que un análisis tema a tema de los dos discos. 24 canciones por delante para analizar. La entrega de hoy, para el primero. Como con The Bright, repito, son opiniones, nada más, personal y subjetivo, no sé de música ni quiero, sólo intento explicaros qué me transmite y me provoca cada canción, no voy a analizaros los desafines ni cosas tan, para mi, intrascendentes. ¡A por ello!

 I Love Your Glasses

"Cause it isn't my heart, it isn't my fault" Es un fragmento de la letra. Gracias a quien sea de que eso sea mentira, y la creación de esta canción haya sido culpa de Lourdes y su corazón. Es perfecta, la mejor del disco, sin duda. La guitarra con el ritmo facilón y pegadizo mola, pero empieza a cantar nuestra querida amiga y... en fin. No sé definirla, lo siento. Sólo que cuesta pasar al siguiente tema, porque uno podría escucharla infinitas veces, una detrás de otra. Mágica, atemporal, inigualable. Es DIOS. Nota: 11/10

O "No Pasta Land", como dicen en la web de Fnac. En fin. Es esa canción que tiene el problema de que en tu mente sigue Cigarettes. Los tambores dan sueño (no por aburridos, sino por profundos y, de nuevo, mágicos, como todo). Esta se va del folk a otra cosa, la señorita Hernández parece contarnos un cuento, hasta que dice el "Land" del título. Ahí es cuando mueres de amor y sólo quieres abrazarla. Salvo ella, el tema en si me deja algo frío, pero aún así es notable. Nota: 7/10

Aquí, aquí empieza una batería de cuatro canciones a cada cual mejor, y además en ese orden. Empieza como Cigarettes, con un ritmillo facilón pero más alegre, con chasquidos de dedos de fondo que no tardarás en imitar. Es divertida, dan ganas de tararearla, moverse, y aunque no entiendas el complemento, decir "They don't believe in..." una y otra vez. De las que alegran los días. Sólo por eso, un 8/10!

Son dos minutos, sólo dos. 120 segundos de profundidad, que empieza con un sonido curiosísimo, cuatro notas de guitarra, y otras dos o tres en otra. Luego Lourdes empieza a hablar con lo de antes de fondo, y nadie sabe por qué se forma un clímax extraño, parece un tipo de evocación hacia algo, para acabar en seco tras varios "Gone, play on". Me vais a ver abusar de la palabra "mágico" pero no tengo más adjetivos. Transmite tranquilidad, sosiego...crea una atmósfera especial a tu alrededor. El poder de la música, en estado puro. Un 9/10 para ella.

Esta es de cantautora total. Bueno, como todas, pero la guitarra suena a vieja, desangelada. La canción en si suena desangelada. Es el contraclímax, los agudos de Lourdes son desgarradores, dolorosos. Si aquella producía relax, esta es algo parecido, tipo silencio incómodo. Como todas, imposible de calificar, como canción aislada es buena, pero me hace sentir incómodo, no transmite buen rollo ni de lejos. Es esa sensación en el estómago que te pone Tool. Raro. Pero por esa capacidad de seguir provocando en ti, 8/10

Vale, podría extenderme hasta el infinito con este T-E-M-A-Z-O, pura perfección, elegancia, MAGIA. Por favor, la primera estrofa, que es un diálogo, "She said hey, won't you pick me up? And he said well, what about at nine? And she wakes up, it's freezing cold outside, and he's not there, wherever he may fly..." POR DIOS, POR FAVOR. No se puede escribir nada mejor. Si no os gusta el estilo de Lourdes, escuchad al menos esta, no hay rival. "She's got nice thick feathers. She's put on, yeah, for she wanted to reach the violent kingdom." Escuchadla decir "yeah" en el primer estribillo. Luego, enamoraos de ella. Qué grande, joder. 12/10

Esto, amiga, amigo, es una NANA. Mayúscula y con todas las letras, una joya de nana. Pon la repetición. Si no te duermes, tienes un problema. Sin embargo, no es ni de lejos la que más me gusta, no sé, otra como No Past Land, me deja frío, pero es que además a esta le sobra minuto y medio. Creo yo. De todas formas, Lourdes acude al rescate y dice "Show me your eyes", y tu vuelves a derretirte con la mejor voz del planeta. Buah. 6/10

Si el principio no te recuerda a la del final de Bob Esponja, no has tenido infancia. Parece de broma, luego adquiere la dimensión del disco. Una chica perdida que no sabe cómo volver a casa, y se lo pide, seguramente, a él. Take me home, take me home, take me home, don't know how you dragged me here" Y su guitarra la encuentra ciega, y... leed la letra y la canción gana enteros. Aquí me da la impresión de que la estrofa está como fuera de sitio, pero el estribillo...como los chasquidos de antes. Vais a acabar cantándolo sí o sí, amiga, amigo. Take me home, take me home, take me home, don't know, take me home, take me home, take me home, don't know... :) Un 7/10 for it.

Las paredes están cansadas, eso nos dice Lourdes. Atención a la letra también, nos habla de que nunca habrá una chica como ella, con sus calcetines hasta las rodillas y su obsesión por las abejas. Venga, dime que no mueres de amor y te dejaré de hablar. La escuchas decir eso y en fin, te entran ganas de conocer a esa chica. Más magia al saco, es todo su voz, pero esta es de las que se asemeja a las de Fuerteventura, misma voz, más elaboración música, con una explosión de energía mientras nos recomienda "Don't stay longer staring at her eyes". La haremos caso. Otra perfecta. 9/10

Penúltimo tema. Otra joyita. A mi esta me parece una exhibición vocal de esta señorita, que nos cuenta que el timing es crucial en el siguiente paso. Otra más que me deja frío, no se por qué. La letra se repite demasiado, pero la guitarra de fondo le pone el parche al fallo. 6/10

Como en las últimas, se olvida del frío de las primeras y alcanza una dimensión más calida y recogida. Esta transmite eso, te faltará el pijama y una chimenea al lado, si es que no las tienes. Dan ganas de hacerse un reguño y dejar pasar el tiempo mientras la escuchas. También aporta ese relax y tranquilidad de otras, que también parece una nana, para acabar lentamente con la guitarra y el pianito perfectos ambos. Gran final del disco.

El disco acaba con una versión del temazo de Cindy Lauper "Girls Just Wanna Have Fun", que mejora Lourdes, para qué nos vamos a engañar. Es otro rollo. No entro a valorarla porque no la ha compuesto ella, supongo que es un tema que aprecia y por eso la versionó, con muy buen gusto, por cierto.
Como conclusión a esta primera parte, pido disculpas por no concretar en las canciones, os dará la impresión de que siempre digo lo mismo pero es que me parece un disco que es para escuchar entero y de una tacada, aporta mil cosas al estado de ánimo. Fijaos, yo me imaginé a Lourdes cantando en una habitación vacía, blanca y fría hasta Nice Thick Feathers, desde la cual cambié el escenario por una casa de madera, con una alfombra roja y una chimenea humeante. Las canciones son buenas todas, por separado, como he intentado calificarlas, dicen más o menos, pero tienen relación, al menos en sonido, con las anteriores, y las completan, para mi dependen unas de otras y si te enseño "Hold It Inside" me puedes decir una cosa, pero tu opinión cambiará completamente si escuchas las tres anteriores y las tres siguientes. Sólo Cigarettes se salva de esto, que es de tal magnitud que hasta por si sola sigue siendo perfecta.

Por esto, os pido que escuchéis el disco, y ya de paso me contéis qué os aporta, transmite, os hace sentir. Serán varias cosas, eso seguro. Le añado un puntito extra al álbum en si por haber sido realizado con tal buen gusto, originalidad y personalidad. Absolutamente imprescindible, de los que debería estar penado no escuchar. Lo mejor de aquel 2008. Puro indie, puro pop, puro folk, pura magia, pura perfección. Quédate muchos años con nosotros, Lourdes.